Mito #1: “La rutina de 10 pasos es obligatoria”
Realidad: Los pasos son módulos opcionales; las necesidades de la piel cambian según la estación y el estilo de vida.
Consejos de expertos:
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Comienza con una base de 3 pasos (limpiar → hidratar → SPF).
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Agrega módulos solo con objetivos claros (por ejemplo, niacinamida para manchas, retinoide para textura).
Mito #2: “Más productos = mejores resultados”
Realidad: Demasias capas pueden irritar o formar grumos.
Consejos de expertos:
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Limita a 4–6 capas nocturnas; alterna los activos en noches distintas (“skin cycling”).
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Si aparece irritación, vuelve a cuidado de barrera (humectante + crema con ceramidas) durante una semana.
Mito #3: “No se necesita SPF en interiores”
Realidad: Los rayos UVA atraviesan ventanas; la exposición acumulada envejece la piel.
Consejos de expertos:
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Usa SPF a diario; si pasas el día frente a pantallas, opta por fórmulas con antioxidantes para reducir el estrés de la luz visible.
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Reaplica si estás cerca de una ventana soleada.
Mito #4: “Las mascarillas nocturnas son una moda”
Realidad: Mejoran la reparación nocturna reduciendo la pérdida de agua y liberando activos lentamente.
Consejos de expertos:
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Úsalas 2–3×/semana como último paso sobre el sérum; evita si usas ácidos o retinoides fuertes y tu piel es sensible.
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Elige fórmulas con glicerina/trehalosa/ceramidas para reforzar la barrera.
Mito #5: “La K-beauty evita el retinol y los ácidos”
Realidad: Muchas fórmulas coreanas usan retinoides suaves y concentraciones controladas de AHA/BHA.
Consejos de expertos:
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Plan para principiantes: ácidos 1–2×/semana; retinoide 2–3×/semana en noches alternas.
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Usa una crema ligera encima del retinoide si sientes descamación o escozor.
Conclusión: Flexibilidad + constancia = resultados sostenibles.
